No como nos gustaría: revisando con calma estanterías y mesas de novedades, recibiendo consejo de los sabios libreros, tocando, eligiendo unos libros y descartando otros para más adelante.
Pero sí con pedidos en las webs (y por teléfono) de las librerías o en todostuslibros.com, con cita previa para la recogida, con todas las precauciones necesarias.
Durante estos dos meses de confinamiento, algunas librerías ya han anunciado que no podrán volver a la actividad. Contaba ayer Inés Martín Rodrigo el caso de algunas librerías, que se plantean cómo reabrir en esta nueva situación.
Como ocurre en muchos sectores, la imposibilidad de vender libros produce un efecto dominó: con las librerías cerradas, las editoriales no podemos vender nuestros libros y, a su vez, esto afecta también a toda la cadena del libro, empezando por los autores y siguiendo con traductores, correctores, maquetadores, diseñadores, impresores, distribuidores y promotores.
Las librerías necesitan a los lectores, nos necesitan, más que nunca. Nosotros las necesitamos tanto como siempre.
#YoMeQuedoEnCasaLeyendo #ApoyaATuLibrería
¡Felices lecturas!